El decidir siempre esta delante de ti,
ya sea que escojas la vida
o la decision que guía a la muerte.
El escojer seguirme es vida.
Pero la muerte seguramente seguirá
si tu escojes a cualquier otro.
El tentador estará ahi con engaño
para proclamar,
“Seguramente no morirás.”
Y en esto esta el dilema puesto ante ti:
que tu creas el engaño o al engañador
mejor que creer la verdad y Dios;
el amar las tinieblas mas que la luz;
el buscar malos caminos mejor
que el camino de justicia.
Siempre esta ante ti,
y es tu decisión: ¡muerte o vida!
Mas el Consolador, el Espíritu Santo, al cual el Padre enviará
en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará
todas las cosas que os he dicho.
(Genesis 3:4,5)
