Yo soy el único sanador
de tu mente y cuerpo.
No mires hacia otros dioses para ésto.
Le he dado a los hombres Mi poder
para imponer las manos sobre el enfermo
y que éste sea sano.
Recuerda, esto tiene que ser
únicamente en Mi nombre.
El Espiritu Santo que mora en tí
te enseñaró todas las cosas sobre Mí.
No escuches otras voces
que levantara otro dios delante de Mí.
Muchos vendrán hablando en Mi nombre.
Cúidate de lo que te digo
de estos engañadores.
Prueba cada espiritu, que creas
que no es Mío.
La mente es un gran engañador
si Mi palabra no es puesta primero.
Te lo he dicho antes
que en estos últimos días
aún los escogidos seián engañados.
En poder y confianza
es tu seguridad. Yo estoy contigo
ahora y para siempre.
Queridos hermanos, no crean a cualquiera que
pretenda estar inspirado por el Espíritu, sino sométanlo a
prueba para ver si es de Dios, porque han salido por el
mundo muchos falsos profetas.
(1 Juan 4:1)
