Yo veo la tristeza
en mucho de Mi pueblo.
Solamente en Mi encontraras gozo real.
Porque Yo estoy contigo en la tristeza,
en tus dolores, si, en todas tus pruebas.
Yo cumparto en todo contigo;
para que no tengas que cargar
tu solo estas cosas.
Solo reconoce Mi precencia
y dejame entrar
para ser el que intercede
ante el trono de gracia del Padre.
Yo soy tu gran Sacerdote para siempre;
habiendo dado el sacrificio que quita
todos los pecados del mundo.
Yo cargué todo dolor en Mi cuerpo
en la cruz del Calvario
para que tu puedas conocerme como tu Dios.
Reconoce esto por ti mismo.
Entrega tu vida propía a Mi
y Yo te dare vida.
Por lo cual puede también salvar eternamente á los que
por él se allegan á Dios, viviendo siempre para
interceder por ellos.
(Hebreos 7:25)
