No déjes que se turbe tú corazón;
ni dejes que este temeroso.
Pues yo he estado a tu lado
todos estos ańos
y he sido fiel
para cuidar por tu bien,
proveyendo para toda necesidad.
Confia que continuare haciendo esto.
Éstas cargas que ahora llevas
pueden ser ligera
si tu me las das a Mi.
Dame todo lo que te pesa,
sin detener nada.
Vine a liberarte de la esclavitud
de las cosas que te tienen cautivo.
Busca la libertad que solo Yo puedo dar.
No mires a alquien mas.
Yo he conquistador
y liberado a los cautivos.
Puedo hacer lo mismo para ti.
Estad, pues, firmes en la libertad con que
Cristo nos hizo libres, y no volváis otra vez
á ser presos en el yugo de servidumbre.
(Gálatas 5:1)
